Dueños de los hoteles Renaissance y Kennedy cuelgan el cartel “Se Vende”
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Al menos, una docena de hoteles de Santiago tienen colgados el cartel de “Se Vende”. Dos de ellos son el Renaissance y Kennedy, ubicados a metros de distancia, en la esquina nororiente de las avenidas Américo Vespucio y Presidente Kennedy, en la comuna de Vitacura.
Según explican conocedores de los procesos que se llevan por separado, por el primer hotel, de cinco estrellas, se piden unos US$ 33 millones. Tiene 181 habitaciones, de las cuales un importante porcentaje están arrendadas a mineras y aerolíneas.
Por el otro inmueble, de cuatro estrellas y 133 habitaciones, sus dueños aspiran a conseguir alrededor de US$ 21 millones.
Este ha sido uno de los rubros más golpeados por la crisis sanitaria, debido, principalmente, a la fuerte baja en la llegada de turistas extranjeros.
La situación podría cambiar en el corto plazo: el Gobierno suspendió la homologación de vacunas para los turistas extranjeros, lo que se suma a la apertura de las fronteras terrestres y al levantamiento del documento C19 al ingreso del aeropuerto.
Según autoridades de Gobierno, este nuevo escenario impulsará la recuperación del empleo en la industria del turismo, que poco a poco va escalando hacia los 700 mil puestos que existían antes de la pandemia entre las áreas de alojamiento, agencias y gastronomía. Hoy el sector suma 578.020 plazas, según datos del Instituto Nacional de Estadísticas (INE).
En abril del año pasado, el fondo Inversiones Hoteleras (IHH) de LarrainVial puso en venta uno de sus principales activos: el hotel The Ritz-Carlton Santiago, en Las Condes. La sociedad también es propietaria del hotel Intercontinental Santiago, Crowne Plaza y el Sheraton Santiago.
Hasta ahora, la firma no ha podido concretar la venta del Ritz, ubicado en pleno barrio El Golf, que tiene una valorización de alrededor de US$ 68 millones.
El activo cuenta con 205 habitaciones, cuatro restaurantes y lounges, un spa caracterizado por su piscina interior con techo de vidrio y 9 mil metros cuadrados de salones de eventos.